viernes, 11 de enero de 2013

Gijón y el problema del PP

Al final, el Pleno del Ayuntamiento de Gijón aprobó esta mañana sus presupuestos para el ejercicio que acaba de comenzar y lo hizo, como no podía ser de otra manera, con el apoyo de los cinco concejales del Partido Popular, coparticipes del proyecto. Se impuso la cordura a pesar de las injerencias externas ajenas al sistema democrático y ese último obstáculo colocado por la dirección regional que preside Mercedes Fernández para obligar al Gobierno de Carmen Moriyón a 'adelgazar' la Administración local se soslayó con un cómodo "ya lo abordaremos" en fechas sucesivas.

Lo más importante ahora es que Gijón tiene unas Cuentas para abordar el año con toda la normalidad que permite una situación económica como la actual. Y que esas cifras están apoyadas por una mayoría de la Corporación, de la misma manera que en mandatos anteriores hicieron los ediles de la izquierda local.

Superado el escollo principal, sigue siendo preocupante que el libreto de esta obra se haya tratado de reescribir desde instancias ajenas a la legítima Corporación Municipal gijonesa. Que los partidos políticos dirigen la política institucional desde sus sedes (a pesar de que sus representantes en dichas instituciones son elegidos en el mismo ámbito) suele ser comunmente aceptado. Sin embargo, nunca antes la transgresión de las normas más elementales de la democracia se ha manifestado tan patente como en este episodio que trasladó el futuro más inmediato de una ciudad a la, en comparación, minúscula sede de un partido (en esta ocasión se eligió un espacio más abierto, es verdad).

Así, pues, más por las formas que por el contenido, hay que rechazar actitudes como la de la 'lideresa' regional del PP y su equipo en este triste episodio. Es verdad que en el PP llueve sobre mojado y que, salvando las distancia, la de ayer es la historia repetida del capítulo final de las últimas elecciones municipales. También entonces la elección de Carmen Moriyón como alcaldesa se sometió a una incertidumbre y una tensión que sólo tuvo un desenlace claro en los minutos previos al comienzo de aquella sesión plenaria. También entonces, Pilar Fernández Pardo y sus cuatro concejales fueron sometidos a una tremenda presión de la dirección regional que entonces presidía Ovidio Sánchez. Teléfonos, reuniones y, por lo que sabemos, en aquella ocasión hasta la intervención directa de María Dolores de Cospedal desde Génova.

Gijón y los gijoneses no pueden estar sometidos a estos sobresaltos periódicamente; ni por el Partido Popular ni por cualquier otro. Las rencillas personales y la lucha por el poder deben dilucidarse fuera de las instituciones. Porque, al final, como parece que se le escuchó decir claramente durante la reunión del Comité Regional del PP a un veterano agitador como es Isidro Fernández Rozada, los presupuestos municipales de Gijón han estado a punto de irse al traste porque "el problema del PP es Foro".

4 comentarios:

  1. El problema de PP (Pili Pardo) es el PP (su partido). Sabe que tiene los días contados y que, muy probablemente, si no antes del congreso local con posterioridad al mismo, le impondrán una gestora que la apartará del mando.

    Y el problema del partido (un decir) en Asturias es el caciquismo. Antes burdo y a mantel puesto (Gabino de Lorenzo); y ahora más rebuscado y de despacho (Mercedes Fernández). En ambos casos, lo más opuesto a una organización dizque democrática. Están cavando su propia tumba (política, por supuesto) con un entusiasmo grotesco.

    raitanucu

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  2. PP y Foro, esos son los canceres y el cuchu de Asturias.No solo uno, los dos, tanto montan, el orin como el estiercol.

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  3. No los mejoran ni los creadores de "El caso Marea", ni sus correligionarios de "Endeuda Gijón como puedas" y aun menos sus sumisos compañeros de cama en ayuntamiento y principado. Si los primeros usted los considera el orín y el estiércol sus alternativas deberán ser la mierda y la mosca que va a la mierda.

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  4. Tiene razon, pero la salvedad es que unos gobiernan, y desgraciadamete estan libres, mientras otros ya pagan por sus delitos. Si la justicia funcionara bien Foro y PP estarian presos en Villabona por sus continuas tropelias frente a todos los asturianos.Supongo que es cuestion de tiempo que gente asi acabe ante la justicia como muchos miembros del PP que continuamente llenan las portadas de los periodicos o los alcaldes famosos de Ponga Y Cabrales. Sea como sea, siguen siendo orin y estiercol.

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