miércoles, 6 de febrero de 2013

A echar cuentas

Poco a poco, con milimétrica precisión, se van cubriendo etapas en la anunciada pugna por el control del PP en Gijón. Tras la escaramuza derivada de la aprobación de los presupuestos municipales, el siguiente paso en la operación de acoso y derribo diseñado desde Oviedo por Mercedes Fernández y su equipo figuraba la que promete ser la madre de todas las batallas de este conflicto interno: un congreso local que, hasta el momento, no tiene fecha, pero que debería celebrarse en los próximos meses.

Y, para ello, una de las primeras condiciones era la confirmación de algo que todos sabíamos ya, aunque precisaba de su oficialización para poder seguir escribiendo esta historia. Esa corroboración, de alguna manera, ya se ha materializado al anunciar un grupo de "unos doscientos militantes" la presentación de un candidatura alternativa a la de Pilar Fernández Pardo. Al frente de la misma aparece un nombre, el de Marisa Morán, conocida desde hace años por su alistamiento en el grupo contrario a la actual presidenta local. Por aquello de que 'excusatio non petita, acusattio manifesta', lo primero que los 'descontentos' se han apresurado a afirmar es que no responden a un proyecto local de 'Cherines' y que su plataforma sólo pretende cambiar el estilo desarrollado en estos últimos años por la dirección local. El caso es que la cabeza visible de esta lista alternativa, la citada Marisa Morán, figuró en la candidatura de la líder regional para las últimas legislativas; una lista que, como quedó bien claro tras la asunción de poderes omnímodos por parte de Mercedes Fernández en Asturias, pudo elaborar a su imagen y semejanza y con absolutas manos libres.

En el otro lado de la trinchera, 'Pilipardo' ha manifestado hoy mismo que ella "no es de las que abandona el barco". Es cierto que la declaración la realizó a preguntas relacionadas con la tormentosa salida del grupo municipal y del partido del que fuera su mano derecha en el Ayuntamiento durante los últimos años, Eduardo Junquera. No parece, sin embargo, que sus palabras no puedan tener una posible lectura paralela orientada a dar un aviso para navegantes a la dirección regional. Aunque la presidenta del PP local declinó confirmar su intención de presentarse a la reelección, nadie duda de que ésa es su intención y que está dispuesta a dar la batalla hasta el final, y hacerlo sobre la base del convencimiento de que mantiene el control del partido en el ámbito municipal por mucho que el equipo de 'Cherines' trate de desmontarle sus apoyos desde una posición de jerarquía interna.

En definitiva, podría decirse que las últimas horas han servido para colocar a cada cual en su sitio y olvidar las ambigüedades. Que 'Pilipardo' no va a abandonar la última opción que le queda de mantenerse en la primera línea de la política es tan cierto como que Mercedes Fernández tiene como objetivo principal en su 'hoja de ruta' borrarla del mapa político asturiano y gijonés.

Con estos mimbres, al menos ahora ya podemos empezar a echar cuentas.

3 comentarios:

  1. Las cuentas son sencillas: si Cherines estima que puede "ganar" el congreso local a través de la candidatura de Marisa Morán, o incluso con una tercera candidatura oficialista a la que se podría sumar a última hora la de Morán, sólo quedaría por determinar la fecha del congreso (por supuesto, ninguna de las dos propuestas por Pardo); si sus estimaciones son negativas, se nombrará una gestora.

    raitanucu

    ResponderEliminar
  2. Salvo a esos 200 militantes ,creo que a la inmensa mayoria de asturianos estas disputas nos importan un comino.Nos da igual quien gane en estas batallitas porque todos han salido de la misma boñiga

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hombre, si tenemos en cuenta que el asunto concierne específicamente a los gijoneses, no es de extrañar que a una mayoría de asturianos (incluídos algunos gijoneses) les importen "un comino" "estas batallitas". Porque se trata, como a nadie se le escapa, de viejas cuitas personales entre la presidenta del PP de Gijón y la presidenta del PP regional, gijonesa para más señas, que están utilizando como armas a sus respectivas organizaciones dentro del partido. Algo que descalifica a ambas y que debería ser tomado en cuenta por la militancia.

      Pero quedarse sólo en eso, en las "batallitas", sería para los gijoneses, o una simpleza, o un enmascaramiento de intereses espurios (hay quien prefiere otro tipo de boñiga); porque no en vano, detrás de todo ello está en juego el asalto al acuerdo de gobierno y a la estabilidad del Ejecutivo municipal.

      raitanucu

      Eliminar